La adolescencia, esa etapa de los hijos que tanto tememos y donde aflora la rebeldía. Puede ser una de las mejores etapas para los jóvenes si somos capaces de orientar bien a nuestro hijo/a. Hoy hablamos de cómo motivar a un adolescente a estudiar.
La actitud de los padres es la clave en la estabilidad emocional del adolescente. Dependiendo de cómo enfoquemos su educación el joven podrá aprender unos u otros valores de nosotros. Sin embargo, estos valores y aprendizajes no derivan tanto de lo que decimos sino de lo que hacemos.
1 El cariño no se compra
Uno de los mayores errores que cometemos los padres es retirar el cariño a los hijos cuando no han conseguido los objetivos y darles más cariño cuando sí lo consiguen. Sin embargo, esto hace que los adolescentes obtengan ese cariño como moneda de cambio al esfuerzo y no como una expresión sincera y desinteresada. El amor de los padres hacia sus hijos debe ser constante y capaz de convivir con una firmeza que les ofrezca responsabilidades.
2 Cómo utilizar los premios
Los jóvenes están descubriendo continuamente diferentes mundos. A veces, las ganas de hacer diferentes cosas les pueden distraer de sus obligaciones, pero esto no significa que aquello que funciona como una distracción sea perjudicial para su educación. Para motivar al adolescente a estudiar podemos utilizar aquello que atrae como un premio.
Ten cuidado de hacerlo de manera negativa (“si no haces los deberes no saldrás este fin de semana”) ya que esto añade más presión al adolescente y puede ser contraproducente.
3 Sé flexible
Ya se decía de los millenials y aún más notorio es con la generación Z: las nuevas generaciones son multitarea. Esto quiere decir que no te debes sorprender porque tu hijo/a le guste estudiar escuchando música o con alguna otra actividad complementaria. Confiar en sus métodos de estudio le darán confianza en su propio trabajo.
4 El pilar de su educación
Algo que puede desmotivar a un adolescente a estudiar es el propio fracaso. Intenta siempre darle una visión positiva de la situación para conseguir que desee trabajar por mejorar. Los padres deben siempre mantenerse como un apoyo a sus hijos que combinan el cariño y las libertades con las responsabilidades.
En este equilibrio, el de ofrecer libertades y responsabilidades al adolescente al mismo tiempo, es en el que está la clave de la educación del menor. Es muy fácil hablar de ello y muchos menos fácil conseguir hacer lo correcto en cada momento. Sin embargo, lugares como Medina Lauxa Academia pueden ayudarte a inculcar el estudio entre las motivaciones de tu hijo/a.
