Cada día más personas inician la aventura de aprender un idioma nuevo y lo hacen con mucha ilusión. Sin embargo, hay muchas personas que se ven obligadas a pasar por este trámite por necesidad de un título de B1 o para mantener un currículum con una calidad mínima. Para todos ellos va dirigida esta guía en la que intentaremos averiguar cuál es el idioma más fácil de aprender para un hispanohablante.
Dos lenguas románicas
Aunque el inglés tiene algunas raíces latinas, el español y el francés comparten un mismo origen lingüístico. Ambas son lenguas romances, es decir, derivadas del latín vulgar que se hablaba en dos países vecinos como son España y Francia.
Es posible, que su origen común pueda ayudarte en tu aprendizaje. Sin embargo, que seas capaz de comprender más palabras al leer francés no hace que sea más fácil estudiarla como lengua. El francés, como lengua hermana del español, comparte una característica similar, una gramática compleja y profunda. Un idioma como el inglés, que a priori se podría mostrar más inaccesible, posee una gramática simplificada que puede ser más sencilla de aprender.
La expansión del inglés
El inglés es el idioma universal a día de hoy y, como tal, estamos inmersos en una lengua de la que podemos tener más conocimiento del que creemos. Una vez entendemos la gramática, es decir, las reglas en las que se mueve una lengua, podemos acceder muy fácilmente al conocimiento de este idioma.
Hazlo por amor
Un factor determinante a la hora de aprender un idioma es que tengas un deseo real de comprender los secretos que se esconden en su cultura. Que te guste la música francesa, las películas de Hollywood o Cannes, el pop o el trap estadounidense o la cultura africana (mayoritariamente francófona), te facilitarán mucho el aprendizaje de la lengua. Saber cuál es el idioma más fácil no es tan útil como saber cuál es el idioma que más te atrae.
Otros idiomas
Partiendo de la base de que necesites un título que acredite tu nivel de conocimiento de una lengua extranjera, es posible que te veas tentado/a a estudiar idiomas como el portugués o el italiano, que son aún más similares al castellano. Sin embargo, estudiar estos idiomas es más difícil, debido a que no poseen una estructura de escuelas y academias lo suficientemente asentada en nuestro país. Además, es más difícil encontrar compañeros que te ayuden a resolver las dudas que surgen durante el aprendizaje.
